Desaprender 1/3

¿Alguien sabe de algún lugar para desaprender?

¿Cuántas cosas que hemos aprendido sirven pa' pura chingada?

Yo diría que casi todas!!!

Hay algunas cosas que puedo rescatar de la escuela que si me han servido para algo:
1) Matemáticas básicas.- Sumar, restar, multiplicar y dividir.
2) Leer y escribir.- Con buena ortagráfia pa' que no haiga criticancia.
3) Física, química y biología básicas.- Para entender aunque sea de una forma sencilla como opera este planeta y sus seres.
4) Civismo.- Me parece fundamental entender como funciona el grupo al que pertenecemos y cuales son las reglas del juego.
5) Educación física.- Pocas cosas sirven en la vida como ver a tus compañeras en short dando marometas o brincando de un ladito y luego del otro!!!

Cosas que definitivamente han servido pa' pura...
1) Historia.- Mal enseñada, llena de fechas y nombres y sobre todo llena de mentiras escritas por los ganadores de las batallas, nos han llenado de héroes pa' q' tengamos cierto grado de identidad, pero lo cierto es que nadie sabe la verdad de los hechos (¿de verdad creen en la historia del cadete que se enredó en la bandera y se tiró a un barranco para que el enemigo no la obtuviera? naaaaa!!!).
2) Matemáticas avanzadas.- Algebra todavía se las paso, pero es del coseno entre la cotangente es igual a la tangente por el seno cuadrado... chá!!! ¿quién podría entender un seno cuadrado?
3) Inglés (en escuela pública).- Pa' q'??? si no van a pagar maestros de calidad, con un sistema claro y confiable, con un seguimiento real del programa de estudio, entonces es de risa y no pasamos de aprender pollito-chiken y gallina-pen.


Estoy seguro que cualquiera que esté leyendo esto, sudó con este libro, si no, es que ni lo abrieron!!!

En el próximo blog hablaré de las cosas que he aprendido fuera de la escuela, las que me sirven para algo y las que me sirven pa' ná...

Mientras eso pasa me gustaría saber algunas de sus experiencias de aprendizaje escolar...

Hasta entonces.

En camino

Cada vez me convenzo más de que tengo poca idea de casi nada.

Demasiada la información, demasiado temas, demasiadas interpretaciones, una por cada ser humano.

Estamos llenos de datos, cifras, afirmaciones matemáticas, físicas, químicas, filosóficas, teológicas...

La ciencia y la religión asegurando tener la verdad (personalmente no le creo nada a ninguna religión) y aparentemente sus verdades son irreconciliables...

¿De dónde sale el deseo humano por saber "LA VERDAD"?

Mirando esta foto que tomé en Playa Azul, Michoacán, me pregunto...

¿Soy el Mar?
¿Soy la arena?
¿Soy las huellas?
¿Soy el sol que ilumina la arena y proyecta las sombras de las huellas?
¿Soy la sombra?
¿Soy tan sólo el hombre que pisó esta arena?
¿Soy la emoción de haber estado ahí?
¿Soy el que está escribiendo?
¿Soy el que está leyendo?
¿Soy humano?
¿Soy DIOS?

Tal vez mi naturaleza humana no permita no saber quién soy.
Tal vez esa información esté reservada para el momento de partir.
Tal vez se LA VERDAD, sólo no puedo recordarla.

Y, aunque no se bien quién soy ni que hago aquí, aunque no se de donde vengo, en donde estoy ni a donde voy, hay algo que me dice en voz muy baja y al oído, que estoy en camino.

El Juguete Japonés

(Plática sucedida el 5 de enero de 2007)

_ Negro, ¿cómo definirías al Amor?, al Amor de pareja, al que sientes por otra persona como imán, como irremediable atracción, a ese que te hace decir... “¡ora si, de aquí soy!”.

_ Creo que es... como Día de Reyes!!! Imagínate que tienes otra vez 10 años y recibes, en el mejor día del año, un-ju-gue-te-ja-po-nés-guau, electrónico, baterías incluidas, multifunción, con hartos foquitos, hartos sonidos y lo mejor, ¡hartos botones!, con el mejor diseño del mercado, ideal para el tamaño de tus manos pero, con instructivo en japonés, no-ma-mes!!!

Pero no importa, la emoción es grande, en cuanto lo sacas de su caja se prende solo, tiene tantos botones que no sabes cual apretar, finalmente te decides por uno de los de enfrente y guau, reacciona maravilloso, hace unas cosas increíbles y eso que sólo has apretado un botón, aprietas otro y otro y otro más, la emoción crece, aprietas dos y luego tres al mismo tiempo y no das crédito a lo que ven tus ojos, a lo que siente tu corazón, quieres salir corriendo de la casa y que todo el mundo vea tu juguete nuevo, gritarle a todos los niños de la cuadra “miren tengo el mejor juguete del mundo en mis manos...” y, aunque esa emoción te dura por varios días, te das cuenta que no sabes para que sirven todos los botones, has apretado tantos y en tantas formas diferentes que ya olvidaste cuales eran tus movimientos favoritos, mientras pasaba el tiempo pensabas si estarías sacándole todo el provecho a tu juguete o si le estabas apretando botones de más. Juegas todos los días con él y tratas de leer el instructivo para saber si lo estás usando adecuadamente, pero es inútil, no encuentras ni en dónde van las pilas.

Un día, se descompone, ya no hace lo que hacía el primer día, ya no responde a lo que le pides, se mueve, pero sabes que algo anda mal, tratas de arreglarlo, pero el estúpido instructivo sirve para una chingada, te enojas, le gritas, le suplicas, lo avientas, lo levantas, lo dejas descansar dentro de su caja algunos días y lo vuelves a sacar, no mames, ya ni siquiera sientes lo mismo que la primera vez que lo sacaste, te rindes, porque te das cuenta que ya no sirve más... que-pin-che-tris-te-sa!!!

Sólo tienes 10 años y tu juguete favorito ya no puede jugar... ¿y qué?, hay muchos más juguetes con los cuales pasársela bien, agarras el primero que te encuentras en el bote de los juguetes viejos y pasas horas con él, tratando de no pensar en cómo se movía tu juguete japonés, en lo que hacía y sobre todo en cómo te hacía sentir... pero no lo logras, este juguete viejo no se le puede comparar. ¿Juguete viejo? Claro!, lo que necesitas es un juguete nuevo, sales al juguetirama y entras al pasillo donde Mattel, Hasbro y Juguetes Mi Alegría presentan sus saldos del 2007, la neta están chidos pero, no hay magia, es comprar por comprar, es jugar por jugar... Pin-che-pin-che-pin-che-ju-gue-te-ja-po-nés!!!

_ Al parecer, no queda más que esperar a que los Reyes te sorprendan con algo mejor (de preferencia con instructivo en español).

Historia vivida, llorada, escrita y compartida con gran placer por:

El Negro

y tu, ¿cómo definirías al Amor de pareja?

GGGRRRRR !!!

Hace un par de semanas a Emilio (mi cachorro de 4 años) le dió varicela, la verdad, con una experiencia de 10 años de ser padre he aprendido a no preocuparme por la enfermedad, si no atacarla de inmediato, cuando su mamá me dió la noticia por teléfono le pregunté que teníamos que hacer a lo cual me respondió que ya lo estaba haciendo, en ese momento se encontraban en el consultorio médico y aunque aparentemente no tendría mayores consecuencias, había que enclaustrar a Madre y chamaco por un par de semanas. Durante la primera semana casi no lo vi, pero su mamá me mantenía al tanto de lo bien que se lo estaban pasando gracias a que el virus no causó mayores estragos en su ser.

En una de las llamadas de esa semana su mamá me contó una historia MARAVILLOSA!!!

Emilio estaba en su recámara jugando mientras ella preparaba la comida cuando...

Emilio:
GGGRRRRR, GGGRRRRR, GGGRRRRR !!!
Su Mamá (entrando a la recámara despavorida):
¿Qué pasa mi Amor? ¿Estás bien?
Emilio (con cara y voz de gruñido, viendo los granos de su pancita):
¡¡¡ Siiiggrrr, es que estoy espantando a los bichos para que se vayan de mi cuerpoggrrrr !!!

¿Ingenuidad o sabiduría?

No se ustedes pero yo creo que es sabiduría, el sabe que desde esa actitud aguerrida, de lucha, de no dejarse, vencerá lo que sea, incluso a los virus que dudo mucho que entienda bien a bien qué son y cómo funcionan. Gran diferencia entre CONOCER y SABER.

Así que siguiendo la enseñanza de Mi Maestro Emilio...

Lo que sigue va para mis miedos, para mis dudas, para mis complejos y traumas, va para mi desidia y mi desorden, va para mis deudas, va para todo lo que se interpone entre Mi y Yo...